El ministro fija para las autonomías el incremento máximo que podrán aplicar en sus campus
Los alumnos, que ahora abonan unos 1.000 euros al año, elevarán su contribución del 15% al 25%
El sistema penalizará a los repetidores, que llegarán a aportar el 100%, unos 6.000 euros
El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, trata con los consejeros autonómicos una revisión al alza de las tasas de matrícula universitaria |
Estudiar en una
universidad española será sensiblemente más caro a partir del curso que viene.
El Ministerio de Educación ha propuesto a las comunidades autónomas una
modificación en el pago de las tasas universitarias que supone hasta 540 euros
más al año en el coste de la matrícula para el estudiante recién llegado y
elevar las penalizaciones a los repetidores, que podrían llegar a asumir el
100% del coste de una plaza, entre 5.000 y 7.000 euros, según estimaciones del
ministerio.
El ministro de
Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, se ha reunido este jueves con
representantes de todas las comunidades autónomas en la Conferencia General de
Política Universitaria para comunicarles los cambios incluidos en un Real
Decreto Ley que previsiblemente aprobará hoy el Consejo de Ministros. Entre las
medidas de ahorro previsto (Educación espera recortar 3.000 millones, aunque
ayer no estimó cuánto pueden suponer los nuevos ajustes) se incluye el aumento
de tasas, que deberá aplicar en mayor o menor medida cada comunidad autónoma.
El ministerio
cambia el sistema (que hasta ahora aplicaba la subida anual del IPC más hasta
cuatro puntos de diferencia en una horquilla) y establece que los alumnos
paguen en función de lo que cuesta su titulación. Así, ha fijado una horquilla
del 15% al 25% del coste para que las comunidades decidan qué porcentaje
aplicar en función de las circunstancias de su región y de los objetivos del
déficit, según señaló la secretaria del Estado de Educación, Formación
Profesional y Universidades, Montserrat Gomendio. De esta forma, el incremento
máximo en primera matrícula sería 540 euros anuales, según las estimaciones
ofrecidas al final de la reunión por Gomendio. El ministro no compareció porque
tenía un acto con Casa Real, según explica una portavoz.
La subida prevista superaría el 50% para la mayoría de afectados y
representaría un 66% para los que salten del 15% al 25% del coste, el máximo de
la horquilla. pero el Ministerio y las administraciones autonómicas aún están
estudiando los detalles, dado que actualmente hay una gran variedad de
situaciones. Algunas autonomías, como La Rioja, ya anticipan que no prevén
aplicar tal alza. País Vasco anunció que sus matrículas subirían "como
mucho" el IPC. Madrid señala que debe estudiarlo y Andalucía calcula que
sus estudiantes cubren a día de hoy un 12% del coste real de la plaza, por lo
que está obligada a aplicar una subida.
El aumento de matrícula se incrementará de forma sustancial para los
repetidores, que si agotan convocatorias llegarían a abonar hasta el 100%. Los
alumnos universitarios españoles pagan ahora entre 700 y 1.400 euros anuales de
matrícula, según ha señalado la secretaria de Estado de Universidades. Esa
cantidad cubre entre el 15% y el 17% del coste del curso, que oscila entre
5.000 y 7.000 euros.
Para los repetidores, el aumento será superior y también comenzará a
aplicarse a partir del curso que viene, según señaló Gomendio, aunque durante
la reunión el ministro planteó que el cambio solo afectara a los que ingresan
como nuevos estudiantes el curso que viene. La segunda matrícula supondrá
entonces entre el 30% al 40% del coste; la tercera, del 65% al 75% y, en caso
de requerirse una cuarta, del 90% al 100%, esos más de 6.000 euros que como
media cuesta una plaza al año.
El ministro Wert ha señalado en varias ocasiones que estas tasas son las
más bajas de Europa y que el hecho de que se financie el 85% es, a su juicio,
como dotar a todo el alumnado de una beca. La secretaria de Estado de
Universidades aseguró que mantendrán las becas “al mismo nivel que hasta
ahora”. Cataluña propuso ayer que el 25% de lo que se recaude con estas nuevas
tarifas se destine a sufragar más becas, algo que Educación no ha incluido en
el texto legal. El Ministerio se compromete a seguir cubriendo las becas como
hasta ahora pero las comunidades que apliquen las subidas deberán cubrir la
diferencia para los estudiantes becados.
La subida de tasas cuenta con el respaldo general de las comunidades
gobernadas por el PP, como La Rioja. Su consejero de Educación, Gonzalo
Capellán, consideró ayer que las medidas buscan “paliar la situación de
déficit” y dejan “un margen importante” a las autonomías. Considera que ampliar
la horquilla para que los alumnos paguen más tasas universitarias “no será un
problema” para comunidades como la suya. “La Rioja podría no subirla porque
tiene una universidad saneada y viable”.
La consejera madrileña, Lucía Figar, señaló tras el encuentro que ahora
toca “hacer números” para decidir cómo aplican la horquilla fijada por el
ministerio y, al mismo tiempo, cumplir el objetivo de déficit “sin perjudicar
la calidad de los servicios públicos”.
Las comunidades gobernadas por el PSOE reclamaron más ayudas a los
estudiantes. El viceconsejero de Universidades del País Vasco, Pedro Luis Arias
(PSE), pidió un equilibrio "adecuado" entre tasas y becas, igual que
el secretario general de Universidades de Andalucía, Francisco Trigueros. La
partida para becas y ayudas que el Ministerio ha aprobado en 2012 para los estudiantes
asciende a 1.265 millones de euros, lo que significa 166,4 millones menos que
en 2011.
Colectivos de estudiantes de distintos puntos del país protestaron al
conocer el incremento. El Consejo de Estudiantes Universitarios de Cataluña lo
tildó de “desproporcionado e inaceptable” y criticó que se hiciera sin negociar
con los alumnos. La subida anunciada “es la peor noticia que se puede dar
porque solo podrá estudiar el que se lo pueda permitir”, valoró ayer María José
Romero, vicepresidenta del Consejo de Estudiantes Universitarios del Estado,
que añadió una advertencia: “Haremos lo posible para que no se aplique”.
La
universitaria es la segunda pata del plan de ajuste puesto en marcha por Wert.
En las escuelas e institutos aumentará el máximo de alumnos por aula (en
primaria de 27 a 30, y de 30 a 36 en secundaria) y se amplían las horas de
clase semanales de los docentes, lo que hace seguro un recorte sustancial de
las plantillas docentes.
Menos títulos, más horas de clase
Además de la subida de tasas, el ministro José Ignacio Wert desgranó ayer otras medidas de recorte a las comunidades autónomas en la Conferencia General de Política Universitaria. Educación quiere impulsar el debate para que se eliminen las titulaciones con menos alumnos, como ya han hecho algunas comunidades autónomas. La cifra que se barajaba como mínima oscila entre 40 y 50 estudiantes por grupo, aunque en el real decreto ley no fija finalmente ninguno, según señaló ayer la secretaria general de Universidades, María Amparo Camarero.
El ministro señaló recientemente en el Senado que el tamaño medio de un grupo es de 55 alumnos y el 42% de las titulaciones en las universidades públicas no llegaba a ese mínimo en el curso 2008-2009. La propuesta plantea que las comunidades y sus universidades negocien posibles ajustes y fusiones, sin marcar de momento límites.
Educación aprobará también que aumenten de las horas lectivas de los profesores universitarios, después de que el ministro de Educación criticara en el último Consejo de Ministros la “ineficacia” que supone que una proporción “muy elevada del profesorado no está investigando ni generando conocimiento”. Así, aumentará la carga de horas lectivas (hasta cuatro horas más y un total de 12 horas a la semana, según la estimación del ministerio) a los profesores investigadores que no tengan sexenios vivos, es decir, que no hayan presentado ninguna investigación en los últimos seis años.
La Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) respondió ante las críticas del ministro que la producción científica española creció un 80% entre 1997 y 2007, hasta constituir “el 3,4% de la producción científica mundial, realizándose dos terceras partes de este porcentaje en las universidades”, según señalan en un comunicado.
La propuesta del Ministerio incluye también la práctica congelación, de momento, de la oferta de empleo público.
Sacado de: ElPaís.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario